“Dios convierte pruebas en propósitos” ✨

Muchas veces atravesamos situaciones que no entendemos. Días de lágrimas, pérdidas, silencios o caminos que parecen cerrarse sin razón. En esos momentos es fácil pensar que Dios se ha olvidado de nosotros, pero la verdad es que Él nunca deja de obrar, aun cuando no lo vemos.

Cada prueba tiene un propósito escondido, y aunque en el presente solo veamos dolor, Dios está formando carácter, fe y dependencia en nosotros. Él no desperdicia ninguna lágrima; cada una riega la semilla de algo nuevo que Él está preparando.

📖 Romanos 8:28 nos recuerda:

“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.”

Eso significa que incluso lo que el enemigo planeó para nuestro mal, Dios lo puede transformar para bien. Las pruebas no son un castigo, sino un proceso que nos moldea para cumplir el propósito que Él diseñó desde antes de nacer.

🌿 Cuando aceptamos las pruebas con fe, el sufrimiento se convierte en testimonio, el dolor en fortaleza y la espera en crecimiento. Dios no solo nos saca del valle: nos hace salir de él transformados.

Así que si hoy estás pasando por algo difícil, no te desesperes. No estás siendo destruido, estás siendo formado.
Lo que hoy duele, mañana será parte del propósito que Dios cumplirá en ti.

💬 Oración:
“Señor, enséñame a ver más allá del dolor. Que en cada prueba pueda descubrir tu propósito y confiar en que todo lo que permites en mi vida tiene una razón divina. Hazme fuerte en la fe y lleno de esperanza, sabiendo que en tus manos mi historia tiene sentido. Amén.”